Mantener las carreteras en un estado óptimo de conservación para garantizar la seguridad en su uso es una de las áreas de actividad de ACCIONA. Las condiciones extremas que se dan con el frío en los meses de invierno hacen que se dediquen unos cuidados especiales para poder usarlos en condiciones óptimas.

El uso de sal y salmuera para prevenir que se formen placas de hielo es la forma más extendida de combatirlo, pero no por ello deja de ser altamente perjudicial para el medio ambiente en las zonas donde se deposita e implica un posterior deterioro de la infraestructura.

Dentro de este campo detectamos la falta de concienciación ciudadana y profesional frente al uso indiscriminado de la sal para combatir el hielo, por lo que nos ponemos a disposición para encontrar soluciones que conciencie, optimice la distribución, o sustituya la sal y salmuera como única solución a las condiciones inseguras que nos trae el invierno.

La sal es el elemento principal para evitar el hielo y la nieve en las carreteras. Sin embargo, las condiciones para verterla están estipuladas en base a la temperatura ambiente para evitar cualquier tipo de riesgo para la conducción de los usuarios de las carreteras. Esta situación hace que sea fundamental calcular bien la cantidad de fundente que se distribuye y dónde es necesario hacerlo, así como calcular la cantidad de material que permanece en la calzada desde la última aplicación para optimizar la distribución y evitar vertidos innecesarios.

El avance en sensores y estaciones meteorológicas portátiles nos hace apostar por la existencia de margen de mejora tanto económicos como para el medioambiente en el ámbito de la vialidad invernal.

Desde ACCIONA estamos abiertos a recibir distintas propuestas, desde la sustitución de la sal y salmuera, la detección de la permanencia de materiales fundentes en la calzada, a la optimización de distribución de los mismos con el objetivo de poner en marcha un piloto donde co-crear un producto o servicio.